Bordillo de Polietileno

Resistencia a temperaturas extremas: El polietileno de alta densidad utilizado en los bordillos es altamente resistente a temperaturas muy bajas, lo que lo hace ideal para entornos de cámaras frigoríficas. Mantendrá su integridad estructural y no se agrietará ni deformará en condiciones de frío intenso.

Aislamiento térmico: Los bordillos de polietileno ayudan a minimizar la transferencia de calor entre el interior y el exterior de la cámara frigorífica. Esto contribuye a mantener una temperatura interna estable y reduce la pérdida de frío, lo que puede resultar en un menor consumo de energía.

Resistencia a la humedad: El polietileno es resistente a la humedad y no se ve afectado por la condensación que puede ocurrir dentro de las cámaras frigoríficas. Esto evita la degradación del material y garantiza una vida útil más larga.

Higiene y facilidad de limpieza: Los bordillos de polietileno son lisos y no porosos, lo que facilita la limpieza y el mantenimiento de la cámara frigorífica. Son resistentes a la acumulación de humedad, bacterias y moho, lo que contribuye a un ambiente más higiénico y seguro para el almacenamiento de alimentos y productos sensibles.

Resistencia química: El polietileno es resistente a una variedad de productos químicos utilizados en la limpieza y desinfección de cámaras frigoríficas. Esto permite el uso de soluciones de limpieza sin dañar los bordillos ni comprometer su durabilidad.

Prevención de daños a productos y equipos: La flexibilidad inherente del polietileno permite una cierta absorción de impactos leves, lo que ayuda a prevenir daños a los productos almacenados y a los equipos dentro de la cámara frigorífica en caso de colisiones accidentales.

Instalación eficiente: Los bordillos de polietileno son livianos y más fáciles de manejar en comparación con alternativas más pesadas, lo que facilita su instalación y puede reducir los costos laborales y de tiempo.

Estética y versatilidad de diseño: Los bordillos de polietileno están disponibles en una variedad de colores y diseños, lo que permite una mayor flexibilidad en el diseño de la cámara frigorífica y la adaptación a las necesidades estéticas y funcionales.

Durabilidad a largo plazo: Dado que el polietileno es un material resistente y duradero, los bordillos tienen una vida útil prolongada en cámaras frigoríficas, lo que disminuye la necesidad de reemplazos frecuentes.